viernes, 6 de junio de 2008

¡Por los pelos!

Uff! Ya creía que ahí, al otro lado del charco, la rabieta de una rubia iba a empañar la victoria de un negro. La historia del mundo nos ha enseñado a todos que la cohesión entre la izquierda ha sido siempre mucho más difícil y polémica que el compacto borreguismo fascista o derechista. Aunque ahí en Estados “Unidos”, todo está mucho más al oeste, ya creía que la historia se haría caso a si misma y metería en el mismo cuadrilátero a Hilary y a Barack. Por suerte, parece que la sensatez se ha apoderado de aquella, haciéndola unir fuerzas contra el enemigo. Aun así, habrá que ver que pasa.

3 comentarios:

felix, icis dijo...

Que los demócratas sean la izquierda yanqui me da muuuuuuuuucho miedo! Que sean lo menos malo es una cosa, que se les llame izquierdosos, una barbaridad!
Arg, una super bomba, y se acabó el imperialismo paternal. La misma mierda es.

El ilustrado dijo...

Y que tu una vez me llamaras terrorista...

Fígaro dijo...

si la verdad que el llamar izquierda al partido democrata no es muy acertado...