martes, 3 de junio de 2008

Imagine...


Ha terminando para mí un fin de semana algo sicodélico. Todo comenzó con la lectura del famoso libro “El guardián entre el centeno”. Hoy, tras haberlo acabado después de un par de días de voracidad literaria, enganchado a la buena literatura, puedo afirmar que sigo con las mismas ganas (desde mi más puro pacifismo) de matar a los mismos sinvergüenzas de siempre, lo normal vamos.

2 comentarios:

felix, icis dijo...

A las aladas almas de las rosas
del almendro de nata te requiero,
que tenemos que hablar de muchas cosas,
compañero del alma, compañero.

Muchas gracias.

Anónimo dijo...

¬¬